¿Y si un día aparecieras al centro de un lago con cielo estrellado en luna llena?
es mucho soñar, pero que ganas me darían de acariciar tu cabello; de sentir tus suaves caricias al borde de mi piel; ese temblor espontáneo, provocado por mis nervios; ese fuego en tus ojos llenos de ternura; tu voz, tan dulce y tierna; y junto con eso nadariamos toda la noche como dos peces en el agua. Ese momento mágico que nos hizo soñar alguna vez volvería a revivirse.
Pero sí, sólo estoy pensando en mí, y no en lo que tu de verdad quieres, soy egoísta al decirte esto, pero sería peor si lo callara...
Ahora bien, disfruta la vida y asegúrate de hacer lo correcto...
Aún asi:
le pediría al viento que te traiga aunque sea como una sombra.
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